He notado últimamente en la consulta por masajes, que aparece repetida una dolencia en particular, que tiene que ver con la parte alta de la espalda y cuello (cervicales). Cuando empiezo a contarles lo que “significan” emocionalmente esas áreas, empiezan a aflorar las lágrimas y suspiros, y los “si, si, es verdad”. El año pasado fue la parte baja de la espalda, ya que fue un año que energéticamente nos impulsó a mirar hacia atrás y hacer limpiezas “en todos los sentidos” o por lo menos a tomar conciencia de que había muchas cuestiones ligadas con el pasado, lo antiguo, lo viejo, que ya no servían mas…sobre todo en lo referente a la familia y el trabajo. Hacia fin de año, el boom fueron las cervicales, el cuello, los cambios! Y las resistencias a esos cambios eran “dolorosas”. Este año empieza reflejando un nuevo movimiento energético a la altura de los hombros…las cargas, las responsabilidades. Todos las tenemos, mayores o menores, pero no significa que vayamos por la vida con el seño fruncido, sufriendo y haciéndonos cargo hasta de lo que no nos corresponde, solamente porque somos “responsables”. Responsabilidad no es lo mismo que seriedad!! Y la seriedad no es lo mismo que el sufrimiento!! La clave esta en mantener dentro de la lista de deberes y obligaciones, algo que nos haga felices, tomar un momento de nuestro tiempo para hacer algo “irresponsable” como leer algo diferente, hacer algún deporte o bailar, Tomar algo y/o charlar con amigos, jugar con tu hijo/a en el barro, pasar un día en pantuflas, cuantas “locuras” se te ocurren que te harían feliz!? No te prives de hacerlas, y usarlas de salvavidas cuando las responsabilidades se hagan mas pesadas, para que no lleguen a ser “dolorosas”.
Karina Sánchez
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